México está en una ubicación ideal y no se puede perder, sobre todo porque vivimos en un entorno donde la logística de envíos internacionales se ve muy afectada y se necesitan soluciones rápidas.

El presente trabajo tiene como objetivo presentar al lector los beneficios y consecuencias que nos brinda el nearshoring en términos de comercio exterior, partiendo de la relevancia que ha ganado el tema a partir del reacomodo de las cadenas de suministro después de l pandemia. Después de la introducción, el trabajo se conforma de la siguiente manera: en el segundo punto se definirá el concepto de nearshoring. En el tercer punto se analizarán sus beneficios y consecuencias para la economía mexicana. Por último, se presentarán las conclusiones.

2.- ¿Qué es el nearshoring?

Frente a la regularidad experimentada, la pandemia ha revelado algunas fallas en el proceso que antes no se habían visto. En el comercio exterior hoy en día, podemos ver claramente algunas prácticas que pueden optimizar la cadena de suministro, entre ellas: la fabricación costera.

México está en una ubicación ideal y no se puede perder, sobre todo porque vivimos en un entorno donde la logística de envíos internacionales se ve muy afectada y se necesitan soluciones rápidas.
El nearshoring es una estrategia de outsourcing en la que una empresa subcontrata parte de su producción a terceros, aunque estén ubicados en otros países, destinos cercanos y con husos horarios similares.

Esta práctica es una respuesta a la deslocalización, ubicando proveedores en otros destinos, generalmente Asia, para reducir costos. No hay duda de que las diferencias de distancia y tiempo entre continentes tienden a tensar las cadenas de suministro; el nearshoring promete acercar los centros de fabricación de subcontratación y eliminar estas brechas.

Se espera que el proceso beneficie a México por su proximidad a la economía más grande del mundo. Este optimismo se refleja en el aumento de las previsiones de los analistas, según las cuales el país puede aumentar significativamente sus exportaciones gracias a la deslocalización masiva de instalaciones productivas a nuestro territorio desde lugares lejanos, especialmente desde China. 

El auge que se avecina se ha descrito como una oportunidad «única», cuyo impacto incluso se ha comparado con el creado por el TLCAN.

Hay varias consideraciones que atemperan esta euforia. La proximidad ha sido durante mucho tiempo un factor en las empresas que consideran menores costos de transporte, mejor control de producción y otros motivos para el proceso de globalización.

El fenómeno actual se diferencia en que se trata en gran medida de un movimiento proteccionista impulsado por los gobiernos de los países desarrollados, especialmente de Estados Unidos. Esto se dio como resultado de las restricciones comerciales y de inversión entre el país y China, cuyo pilar fue una forma de guerra comercial impulsada por el expresidente Trump en 2018 y ampliada por otras acciones de la actual administración estadounidense.

3.- ¿Cómo se posiciona México ante el nearshoring?

De acuerdo con la encuesta de 2019 realizada por Statista a los proveedores importadores mexicanos, vemos que poco más del 45 % proviene de Estados Unidos y casi el 30 % proviene de China, Japón, Alemania y Corea del Sur. 

Algunas cosas, esto nos queda claro hoy, se pueden optimizar la logística en alta mar la cual se ha visto muy afectada por la pandemia, ya que muchos proveedores estadounidenses tienen su sede en Asia, siendo China uno de los proveedores más importantes.

Las interrupciones comerciales en el país a principios de año muestran cuán frágil es la deslocalización, especialmente cuando los proveedores son exclusivos o están ubicados en el mismo país. Por ello, la resiliencia organizacional ha llevado a que cada vez más empresas adopten el nearshoring, no solo en México y Estados Unidos, sino también en otros países americanos.

El mayor importador del mundo está en Estados Unidos: aunque China ha sido uno de los mayores proveedores de su vecino durante muchos años, las relaciones entre ambos países se están deteriorando en Estados Unidos.

México poco a poco ha ido avanzando ante esta situación, y ahora estamos en una posición bastante favorable para que más empresas estadounidenses se trasladen al exterior y se concentren en nuestro país. Estos son los factores que contribuyeron a la creación de la línea de costa entre México y Estados Unidos:

● Relaciones complicadas entre China y Estados Unidos.

● T-MEC para promover el comercio entre México, Estados Unidos y Canadá.

● Los dos países son adyacentes entre sí.

● Los costos laborales de México son bajos.

● Nuestra cadena de suministro rápida y segura.

Las industrias nacionales, especialmente la industria automotriz, tuvieron un buen desempeño. Aunque EE. UU es nuestro mercado más atractivo en el continente africano, no podemos ignorar otros países con los que podemos hacer negocios. América es un continente con muchas cosas en común que facilitan los negocios. Encontrar nuevos mercados y nuevos proveedores en la región contribuirá al desarrollo no solo del país, sino de todo el continente.

Aunque la mano de obra no es tan barata como en Asia, nuestra competitividad puede no ser comparable a la de los países asiáticos, pero definitivamente compensará los costos de logística de fletes y reducirá los riesgos de la distancia.

La búsqueda de la recuperación económica ha permitido que el comercio exterior afectado por la pandemia encuentre alternativas para optimizar las cadenas productivas y así encontrar una de las soluciones más rentables en la zona costera.

Entonces, si una empresa no ha considerado este enfoque, puede estar seguro de que le traerá muchos beneficios. La pandemia de Covid-19 y las interrupciones en la cadena de suministro causadas por la invasión rusa de Ucrania han dado a los gobiernos más razones para tomar medidas para encontrar inversiones «esenciales» para la autosuficiencia o la autosuficiencia regional.

Su alcance es en realidad indeterminado. Un ejemplo de esto es la Ley de Chip y Ciencia aprobada en Estados Unidos en agosto pasado, que proporciona un fuerte apoyo financiero para la investigación y fabricación de semiconductores en el país.

Los movimientos oficiales para desfragmentar el comercio enfrentan límites. Podría decirse que lo más importante es que el alejamiento de la especialización nacional y la ventaja comparativa significa mayores costos de producción global y menos actividad económica. 

Este proteccionismo afecta particularmente a las economías que lo utilizan, como lo demuestra la caída de la producción manufacturera estadounidense provocada por la guerra comercial antes mencionada.

Más allá de depender de la precaria noción de amistad internacional, la amistad puede promover el comercio entre economías con niveles de ingresos similares. Los resultados incluirán mayores pérdidas de eficiencia y estancamiento en la reducción de la pobreza en los países en desarrollo.

Tampoco está claro si el movimiento costero ha tenido el efecto deseado de hacer que las cadenas de suministro sean más resistentes. La concentración regional y el aislamiento geopolítico pueden aumentar la vulnerabilidad del suministro al cambio climático u otras perturbaciones. 

Estas y otras limitaciones pueden impedir que las tendencias no se desarrollen de manera significativa. Pero incluso si logra un progreso real, la reubicación costera no traerá necesariamente los beneficios anunciados a México. Si las limitaciones de la globalización son profundas, limitará el crecimiento económico de los Estados Unidos, lo que, de igual manera, podría contraer el crecimiento económico de nuestro país. La externalización de la amistad también puede conducir a la diversificación y excluir a China a favor de China.

Conclusiones:

Por lo tanto, y más importante aún, las políticas económicas de México actualmente apuntan a crear incertidumbre y desalentar la inversión a través de prohibiciones y cambios en las regulaciones que desalientan la creación y operación de empresas. Dos síntomas de esta orientación son la disputa generalizada con Estados Unidos y Canadá por temas energéticos bajo el T-MEC y la falta de infraestructura de servicios de agua y electricidad para las instalaciones en la parte norte del país. El progreso económico de México no puede depender de una costa cuyos beneficios son inciertos y no garantizados. La celebración excesiva basada en la suerte geográfica solo conduce a la complacencia y puede ser el preludio de una gran decepción.

Referencias bibliográficas

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Bolio, E. y otros (2014), A Tale of Two Mexicos: Growth and Prosperity in a Twos-peed Economy, McKinsey Global Institute

CMET (Consejo Mexicano del Transporte) (2012), México Plataforma logística de América: agenda de desarrollo en el sector transportes. Agenda de acciones 2012-2030

Hernández, L. (2021), “Explorando las dinámicas manufactureras globales: México contra China”, TierplusMx, N° 1, index

Pérez, Miguel (2019), Vínculos productivos en América del Norte, Sede Subregional México CEPAL

Por Asael Polo

Economista por la UNAM. Especialista en finanzas bancarias y política económica. Asesor Económico en Cámara de Diputados - H. Congreso de la Unión. Escribe para Asuntos Capitales, Viceversa.mx y El Tintero Económico. Twitter: @Asael_Polo10

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