El que pase o no esta iniciativa de Reforma Judicial, depende de que los 43, de los que originalmente eran 45 senadores de oposición, se mantengan como los espartanos de Leonidas, en el Paso de Termopilas, deteniendo al mayoritario ejército persa.

Estos 43, son ya la última esperanza, para que no caigamos en una grave crisis económica; para mantener un Poder Judicial independiente, que frene los abusos del gobierno; para que no se dañe una democracia, en donde todos estemos incluidos y aspiremos a ser verdadera República, donde existan, convenientes frenos y contrapesos.

Paradojicamente los que también se beneficiarian, si los 43 se mantienen firmes, serían el presidente López Obrador y la presidenta electa Claudia Sheinbaum; porque hay dos cosas evidentes: la primera es que la gran mayoría de la población, sí está de acuerdo con esta Reforma Judicial y cree cómo dogma, que ésta solucionará los indudables vicios y defectos de la procuración e imparticipación de justicia; la segunda es que lo anterior no es cierto, y esta reforma no va a lograr lo que ofrece; ya que así cómo se aprobó en diputados, es mucho más imposible que el tener un servicio de salud, mejor que el de Dinamarca; y cuando esto suceda y surjan los inevitables problemas económicos y sociales, el empeoramientos en la procuración e imparticipación de justicia, haya conflictos, se evidencien los daños, perjuicios, ineficiencias, y quede evidenciado lo ineficaz de la reforma; el grave costo político, será para AMLO, Sheinbaum y MORENA. Pero si éstos 43 se mantienen firmes, el costo político será para los ya muy débiles partidos de oposición.

El gobierno actual y próximo, no pueden echarse atrás, por más peticiones y presiones internas y externas para que lo haga; pero ya se dan cuenta, que ello causará un gran daño económico y social, que mucho les afectará políticamente y en su paso a la historia.

La salida de proclamar: nuestra magnífica y patriótica propuesta, fue detenida por la mafia del poder, el poderoso grupo conservador, el nefasto Claudio X, etcétera, le daría más respaldo popular al gobierno, y al mismo tiempo evitaría las cuestiones negativas, cómo el efecto en la inversión y en imagen democrática en el exterior de México.

El propósito de anular al Poder judicial, de todos modos lo van a lograr en poco tiempo, porque ya se van a cambiar ministros de la Corte, y con tener el gobierno, solo un o una ministro más, que se sume a las 3 incondicionales que ya tiene en la Suprema Corte, ésta ya no tendría la posibilidad de hacer declaraciones de inconstitucionalidad, y como tienen una sobrada mayoría simple, podrían aprobar las leyes que quieran, sin el riesgo de que la Suprema Corte las declare inconstitucionales.

Si se aprueba así, dañaría el prestigio del gobierno, ya que si la sacan, será en una forma muy sucia, vulgar y corrupta, pues sería como resultado de comprar, chantajear o sobornar, a tres o más senadores, por los que el pueblo votó, para que fueran de la oposición. Y si comprar el voto es delito, es peor comprar a un senador para que traicione a quienes votaron para que fuera de la oposición y no del oficialismo.

Todo poder público dimana del pueblo y se instituye en su beneficio, y esa reforma solo traerá daños y perjuicios a México, incluso al propio gobierno, por lo cual estos 43 senadores, pueden ser los grandes héroes, los grandes salvadores de la patria, o puede haber un tercer traidor.

Mario Rosales Betancourt.- Abogado y Maestro en Derecho. Profesor de la asignatura de Derecho en la FES Acatlán de la UNAM y en la UAM-A.

Twitter: @Rosales76059

Por Víctor H. Becerra

Presidente de México Libertario y del Partido Libertario Mx. Comunicación política (ITAM). Escribe regularmente en Panampost en español, El Cato y Asuntos Capitales entre otros medios.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *