No se puede saber si realmente Calderón conocía, o tenía la certeza, de los actos criminales de Garcia Luna, pero no oyó lo que periodistas y aún algunos funcionarios de su propio gobierno, dijeron pública y privadamente sobre él, así que en el menos malo de los casos, al ignorar y no hacer caso de ello, fue un negligente muy irresponsable, porque la otra sería que fue cómplice.
López Obrador continua minimizando el asunto de las tesis, tanto de licenciatura como de doctorado, y aun defendiendo a la ministra Jazmín Esquivel. Y es obvio que ésta voluntariamente no va a dejar su cargo, y va usar todos los recursos que tiene para mantenerse, con lo que legalmente, es muy difícil, que se logre hacer algo, para retirarle su nombramiento en la Suprema Corte de Justicia.
Lo único que crece es su desprestigio, y este creciente desprestigio, ya a ella no le afecta, pero al que sí y mucho, es al presidente López Obrador, ya que fue él quien la propuso y apoyó para que llegara a ser ministra de la Suprema Corte, e incluso aspirara a presidirla.
Creo que López Obrador, no debería actuar como Calderón, que mantuvo a Garcia Luna pese a los problemas que le ocasionó, incluso hasta con el gobierno de Francia.
López Obrador debería y puede pedirle a su amiga, que por el bien de su propia imagen y de su proyecto, deje su cargo, y designar a alguien también de su confianza, pero que no cargue con la ya mala imagen de la ministra Esquivel.
Además de que la ministra Esquivel representa lo que el presidente López Obrador más ha criticado: el aspiracionismo, lo fifí, la acumulación como sea de títulos académicos, etc.
La verdad es que si la ministra sigue actuando de manera chicanera y leguleya, legalmente no será posible separarla de su cargo; la forma en que actuó la Universidad Anáhuac lo evidencia, por lo que el presidente López Obrador debe pensar en los costos políticos de mantenerla, y que si lo hace, pese al escándalo, estará actuando como Calderón, cuando se negó a remover a Genaro Garcia Luna, pese a las críticas privadas y públicas que se le hacían, sobre su actuación como secretario de Seguridad Pública.
Mario Rosales Betancourt, abogado y Maestro en Derecho. Profesor en la FES Acatlán de la UNAM y la UAM-Azcapotzalco.