Introducción:

En el presente trabajado se analizarán cuáles son los puntos por los cuales el Banco central de México podría desvincularse de la política monetaria de EEUU, y así blindar y brindar las señales a los agentes económicos para que gocen de independencia y autonomía en sus decisiones.

Después de la introducción, el trabajo se conforma de la siguiente manera: en el segundo punto se revisarán los retos de la Fed para corregir sus errores del pasado para paliar la inflación. En el tercer punto su vinculación con la política monetaria en México como sus repercusiones ante las decisiones de la Fed. Por último, se presentarán conclusiones.

2.- Los retos de la Fed para paliar la inflación.

El programa incluye desde hace tiempo la participación como orador del presidente del Banco de la Reserva Federal (Fed) del país, que tradicionalmente ha recibido mucha atención por su potencial impacto en la economía. Jerome Powell, el actual presidente de la Fed, pronunció un discurso inusualmente corto y directo en la reunión de este año durante el fin de semana. Señaló que esencialmente el enfoque del banco central en devolver la inflación al objetivo de 2,0% llevará tiempo y el uso de instrumentos “rigurosos” para moderar la demanda agregada.

El esfuerzo, dijo, podría requerir “un período continuo de crecimiento por debajo de la tendencia”, cuyas consecuencias significarían “dolor” para los hogares y las empresas. Powell destacó tres lecciones de la historia de la Fed: los bancos centrales pueden y deben asumir la responsabilidad de una inflación baja y estable; las expectativas públicas pueden jugar un papel importante en el desarrollo de la inflación; y la Fed debería esperar hasta que el trabajo esté terminado.

El discurso de Powell fue enriquecedor porque dejó más clara que nunca la determinación del banco central de luchar contra la inflación. Está claro que sus palabras fueron un intento de corregir tres errores que la Fed ha cometido repetidamente durante los últimos dos años, que pueden haber socavado la credibilidad de la estrategia monetaria.

El primer error es subestimar el riesgo de inflación a largo plazo. En la conferencia de Jackson Hole del año pasado, el banquero central defendió por completo esta interpretación, y gran parte de su discurso se dedicó a convencer a su audiencia a través de una variedad de indicadores de que la inflación sería un fenómeno temporal derivado de la falta de apertura y el “cuello de botella”. Consecuencias económicas y de la pandemia.

El segundo error se debe a la tendencia a no adoptar una postura cautelosa ante el recrudecimiento de la inflación. Si bien puede ser difícil distinguir entre aumentos de inflación a corto y largo plazo, la Fed ha optado durante mucho tiempo por errar del lado de la expansión en lugar del lado restrictivo de la política monetaria. En la reunión de 2021 antes mencionada, Powell argumentó que endurecer la política monetaria a la luz de lo que él creía que eran factores temporales sería un “error particularmente dañino”.

La tercera debilidad radica en la información poco clara sobre la posible intensidad del endurecimiento de la política monetaria a partir de marzo de 2022. Powell insistió en una conferencia de prensa reciente en que la Fed quiere ajustar la política monetaria mientras intenta lograr un “aterrizaje suave” para la economía. Según la hora al mismo tiempo, muchos participantes mencionados en julio del año pasado en el momento necesario en el momento necesario en la conferencia de bolsa requerida en julio pasado. Estos signos y otras hermanas han interpretado a muchas personas como una oportunidad para detener la adaptación audaz y transformarla en una importante debilidad financiera.

3.- vinculación con la política monetaria en México como sus repercusiones ante las decisiones de la Fed.

Con un régimen de tipo de cambio flexible, cualquier país puede disfrutar de la independencia monetaria, la capacidad de implementar la política monetaria para fines internos sin verse influenciado por las monedas extranjeras. Esta posibilidad está contenida en el principio económico de la “trinidad imposible”, según el cual dos de los siguientes tres objetivos pueden ser alcanzados consistentemente: estabilidad del tipo de cambio, libre flujo de capitales e independencia monetaria en lugar de los tres objetivos. Por tanto, las medidas monetarias sostenibles deben abandonar uno de estos objetivos. Por ejemplo, los países del euro sacrificaron el tercero, pero China suele hacerlo. Los esfuerzos a largo plazo para implementar los tres conducirán tarde o temprano a una gran crisis de balanza de pagos, como la que ocurrió en México en 1994.

Con un régimen de tipo de cambio flexible, cualquier país puede disfrutar de independencia monetaria, definida como la capacidad de implementar una política monetaria para fines internos sin influencia monetaria externa. Esta posibilidad está incrustada en el principio económico de la “trinidad imposible”, según la cual solo dos de los siguientes tres objetivos pueden lograrse de manera consistente: estabilidad del tipo de cambio, libre movilidad del capital e independencia monetaria, pero no los tres al mismo tiempo. tiempo, por tanto, las medidas monetarias sostenibles deben abandonar uno de estos objetivos. Por ejemplo, los países del euro sacrificaron el tercero, pero China suele hacerlo. El intento prolongado de implementar las tres tardes o temprano ha llevado a grandes crisis de balanza de pagos, como la de México en 1994.

Sin embargo, la autonomía monetaria a veces se ve limitada por el fenómeno del “miedo a la liquidez”, que se manifiesta en el uso de tasas de interés de referencia y la intervención en los mercados financieros, mientras se logra el objetivo de controlar la inflación y evitar fluctuaciones bruscas en los tipos de cambio. Se han esgrimido varios argumentos, como proteger la “competitividad” de las exportaciones cuando sube el tipo de cambio o evitar la inestabilidad financiera cuando baja. Varios estudios han demostrado que los países en desarrollo han experimentado sistemáticamente menos volatilidad del tipo de cambio que los países desarrollados durante ciertos períodos porque los primeros utilizan estos métodos más que los segundos.

Desafortunadamente, la menor dependencia de la moneda puede debilitar la reputación de la política monetaria al introducir su promesa de propósito. Desde 2001, el Banco de México ha utilizado oficialmente un plan objetivo claro que ha permitido que la inflación se reduzca. Sin embargo, las metas no están convergiendo y las expectativas de inflación a mediano plazo se mantienen por encima de la meta, lo que parece reflejar una falta de credibilidad en la política monetaria.

Entre otras cosas, este fracaso puede deberse al hecho de que Banxico ha sacrificado parte de su independencia monetaria en un esfuerzo por alinear sus decisiones con la Reserva Federal. Varias acciones del Banco de México parecen respaldar esta suposición. En 2011, Banxico redujo la frecuencia de las reuniones de divisas a ocho, el mismo número que la Fed. Además, en julio de 2015, retrasó el resto del año hasta unos días después de la reunión de la Fed en respuesta al anuncio de que el banco central estaba considerando su decisión. La práctica ha continuado desde entonces. Asimismo, Banxico tiende a seguir la dirección de la política monetaria de la Fed, aunque no en cuanto al tamaño o frecuencia de sus ajustes. Al igual que la agencia central, el Banco de México pasó por una larga fase de flexibilización que finalizó en diciembre de 2015, seguida de una fase de endurecimiento el mismo mes y otra fase de flexibilización en agosto de 2019.

Conclusiones

Para reforzar la credibilidad de su compromiso con la estabilidad de precios, la Fed tiene muchos asuntos pendientes. Lo más importante, por supuesto, es implementar lo que dice su presidente. La claridad de la información es una condición necesaria para la eficiencia del dinero, pero puede ser contraproducente si no se acompaña de acción. Un regreso a las condiciones antiinflacionarias exacerbará el problema, lo que implicará ajustes más estrictos.

Además, desde marzo de 2013, Banxico ha hecho del “estado monetario relativo” de México y EE. UU. una consideración clave en sus deliberaciones. El concepto carece de desarrollo teórico, quizás porque viola la independencia monetaria y carece de una medida precisa, ya que Banxico ha considerado todas las herramientas de política monetaria de la Fed a lo largo de los años, incluidas las compras de activos a gran escala y la “orientación a futuro”. El Banco de México debe determinar su estado monetario sobre la base de los objetivos prioritarios contra la inflación. Apoyar sus decisiones en reservas federales aumentará el riesgo de duda que refleja la capacidad de lograr objetivos.

Referencia Bibliográfica:

Anuncios de decisiones de política monetaria y minutas de la Reserva Federal http://www.federalreserve.gov/monetarypolicy/fomccalendars.htm

Anuncios de decisiones de política monetaria del Banco Central Europeo https://www.ecb.europa.eu/press/govcdec/mopo/2015/html/index.e n.html

Banco de México (2019) Importancia de la estabilidad financiera para el crecimiento económico https://www.banxico.org.mx/publicaciones-y-prensa/reportes-sobre-el-sistemafinanciero/%7BA230BCDB-3469-CFFE-A79E-D95E9C149B07%7D.pdf

Loretta Mester (2016). Five Points About Monetary Policy and Financial Stability. Cleveland Fed (Speech) https://www.clevelandfed.org/newsroom-and-events/speeches/sp-20160604-fivepoints.aspx

Por Asael Polo

Economista por la UNAM. Especialista en finanzas bancarias y política económica. Asesor Económico en Cámara de Diputados - H. Congreso de la Unión. Escribe para Asuntos Capitales, Viceversa.mx y El Tintero Económico. Twitter: @Asael_Polo10

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *